Reliquiae. Música y reliquias en la Edad Media. De la Capilla Real de Francia a la Capilla Real de Aragón (1237-1437) Capella de Ministrers
El conjunto valenciano Capella de Ministrers acaba de lanzar un nuevo disco de música medieval cuyo eje vertebrador son las reliquias, especialmente las pertenecientes a las Capillas Reales de Francia y Aragón en los siglos XIII y XIV. El trabajo se basa en una meticulosa investigación para arrojar luz acerca de la relación entre la música y estos objetos de devoción, protagonistas de la espiritualidad del Medievo europeo. Reliquiae constituye la grabación número de setenta de la abundante discografía de este grupo -que con frecuencia publica más de una vez al año-, cuya trayectoria artística dentro de la música antigua ya abarca treinta y siete años.
Aunque el ensemble dirigido por el violagambista Carles Magraner fija con frecuencia su terreno de juego en la Edad Media no son raras las incursiones realizadas en la música renacentista (Alegoría del amor, Super Lamentationes) e incluso en épocas algo posteriores (Claroscuro, Mediterrània) si la temática del programa así lo demanda. En todas las ocasiones Capella de Ministrers enfrenta con éxito el abordar los distintos repertorios con creatividad y rigor historicista.
En este caso, Magraner aborda el estudio de las formas musicales que pudieron acompañar las ceremonias religiosas de presentación de las reliquias, que presumiblemente iban acompañadas de himnos y oraciones. Para ello ha contado con la colaboración de la musicóloga Maricarmen Gómez Muntané, quien también firma el texto que contiene el libreto que acompaña el disco.
La raíz latina reliquiae que da título al disco significa restos, con especial referencia al cuerpo humano o a parte del mismo, pero de forma más amplia pueden ser reliquias también los objetos que tuvieron un contacto con la persona venerada. En el marco del cristianismo, la reliquia es lo que deja una persona santa después de su muerte, ya sea su cuerpo, los instrumentos de suplicio en el caso de los mártires u objetos que les pertenecieron y reciben la veneración de los fieles. La capilla real de la corona de Aragón destaca en la Edad Media por sus reliquias y relicarios, y, de esta forma, articula en mayor medida el contenido de esta obra, dividida en cuatro secciones.
La primera parte presenta música asociada a reliquias procedente de las Cantigas de Alfonso X y del Codex Calixtinus. En concreto, la Cantiga de Santa María 148, narra cómo las telas tocadas por el velo de la Virgen, la reliquia Carnotum camisia conservada en la catedral de Chartres, tienen el poder de hacer que quienes vistan prendas confeccionadas con ellas no puedan ser heridos por sus adversarios. Por su parte, la Cantiga Ben guarda Santa Maria pone de manifiesto la veneración de las reliquias por parte del Rey Sabio. Finalmente, el disco incluye una pieza de Ato episcopus Trecensis del Códice Calixtino que constituye un himno al apóstol Santiago y a su tumba como destino de peregrinación.
Las partes siguientes de Reliquiae están en su mayoría basadas en dos documentos no demasiado conocidos. El denominado Libre de les sanctas reliquies es un libro de canto llano que pudo pertenecer a la capilla del rey Martín I, y Les reliquies del Senyor Rey es un manuscrito de himnos en latín con títulos en catalán conservado en la Biblioteca Nacional de Madrid.
El disco ha sido grabado en San Juan del Hospital, la iglesia más antigua de Valencia, y en él han intervenido la soprano Èlia Casanova junto con la formación de voces Lluís Vich Vocalis, acompañados por los instrumentistas Carles Magraner, vihuela de arco y dirección, Robert Cases, arpa, cítola, laúd y vihuela de péñola, Eduard Navarro, cornamusas, oud y guiterna, y, finalmente, Pau Ballester en la percusión.
Se trata de un trabajo interesante, como todos los de Capella de Ministrers, que nos acerca a una faceta poco documentada de la música medieval.